HIAS abre una nueva oficina en Sudáfrica; ahora asiste a refugiados en 24 países

DURBAN, Sudáfrica - HIAS, la organización humanitaria judía mundial sin ánimo de lucro que presta servicios esenciales a refugiados, solicitantes de asilo y otras personas desplazadas por la fuerza en todo el mundo, ha anunciado la apertura de su nueva oficina nacional en Sudáfrica. Con esta ampliación, la red de más de 20 oficinas nacionales de HIAS sigue creciendo en África, Europa, América Latina y el Caribe, Oriente Medio y Estados Unidos.

"HIAS lleva mucho tiempo interesada en operar en Sudáfrica, como país que acoge a una comunidad diversa de solicitantes de asilo y que alberga a la mayor comunidad judía del África subsahariana", dijo Mark Hetfield, Presidente y Director General de HIAS. "Impulsada como siempre por el mandamiento de la Torá de Acoger al extranjero, HIAS está entusiasmada por asociarse con la comunidad judía sudafricana y con la vibrante sociedad civil del país que lleva décadas ayudando a las personas desplazadas."

"Estamos especialmente contentos de que HIAS Sudáfrica comience sus operaciones en Durban, en KwaZulu-Natal, una provincia en la que podremos beneficiarnos de los conocimientos y la experiencia de organizaciones asociadas de la sociedad civil que llevan muchos años trabajando con personas desplazadas, pero en la que existen numerosas lagunas que podemos ayudar a subsanar", declaró la Directora Nacional, Alana Pugh-Jones Baranov. "El objetivo inicial de HIAS Sudáfrica será garantizar que los refugiados, solicitantes de asilo y otras personas desplazadas reciban asistencia jurídica, que conozcan sus derechos y sean capaces de navegar por el proceso para obtener la documentación correcta. Nuestro trabajo también se centrará en abordar la salud mental y el apoyo psicosocial, así como en apoyar a las mujeres y los niños y a la comunidad de refugiados LGBTIQ++ que corren el riesgo de sufrir violencia de género."

"Otro aspecto clave de nuestro trabajo será centrarnos en la defensa, la lucha y la concienciación sobre la xenofobia y la afrofobia desenfrenadas, en las que compatriotas africanos de todo el continente son discriminados en este país por ser extranjeros", afirmó Baranov. "Son muchos los que están haciendo un buen trabajo, pero a medida que aumentan los retos, creemos que HIAS Sudáfrica tiene un importante papel que desempeñar capacitando a las redes e iniciativas existentes y coordinando y convocando algunos de los esfuerzos para ayudar y defender a los refugiados, solicitantes de asilo y migrantes en el país."

"Nuestro trabajo se inspira en los valores de la tradición judía, los del tzedek, o justicia, y tikkun olam, o reparar el mundo, así como los principios de los derechos humanos consagrados en la Constitución de Sudáfrica y nuestra Carta de Derechos, que protegen la libertad, la igualdad y la dignidad de todos los que viven en Sudáfrica", declaró Baranov.

Adoptando un enfoque de localización y trabajando a través de socios locales, HIAS Sudáfrica espera hacer crecer sus operaciones de forma lenta y sostenible, y ampliar su trabajo a otras regiones geográficas del país y a otras áreas clave como los medios de subsistencia y la integración económica en el futuro. Las actividades de HIAS Sudáfrica también se basarán en el seguimiento y la investigación de datos, así como en la divulgación interreligiosa y el trabajo de cohesión social entre diversas comunidades locales y de refugiados, solicitantes de asilo, migrantes y desplazados.

"Aprovechando la experiencia y las mejores prácticas de las oficinas y operaciones de HIAS en todo el mundo, esperamos hacer una contribución única y poderosa a la sociedad civil sudafricana en los sectores de refugiados y derechos humanos y más allá", dijo Baranov.