Objetivos para la inclusión de los refugiados en Kenia
Por Beverly Goldberg
HIAS.org
12 de julio de 2024
El fútbol ocupa un lugar especial en los corazones de muchas personas de todo el mundo, pero incluso un deporte que cautiva a miles de millones en todo el mundo puede resultar aislante para los refugiados, que no se sienten representados por los equipos de su país de origen o de acogida.
Por eso HIAS Kenia, junto con el gobierno local de Nairobi y las organizaciones asociadas ACNURLa Fundación IKEA, el Comité Internacional de Rescate y Re:BUiLD decidieron intentar cambiar esta situación, partido a partido. Para conmemorar el Día Mundial del Refugiado de este año, organizaron un partido de fútbol para los jóvenes refugiados que viven en Nairobi. La idea del partido era fomentar la unidad, la tolerancia, la cohesión y la integración entre los jóvenes desplazados y la comunidad local.
Nuestro equipo detectó graves lagunas en la integración de los refugiados en las comunidades de Kenia, y nos dimos cuenta de que el fútbol podía ser una forma estupenda de "atajarlas"", explica Robinson Mito, responsable de protección legal para HIAS Kenia.
Los refugiados participantes en el partido procedían de países como la República Democrática del Congo, Burundi y Ruanda. Jugaron contra un equipo local de jóvenes kenianos, que también participaron en actividades educativas y culturales para aprender más sobre la importancia de acoger a los refugiados.
"El fútbol es una forma de que los refugiados puedan compartir con el mundo los dones que tienen"
Emmanuel Banza, movilizador comunitario y organizador del partido
Emmanuel Banza*, de 40 años, es un refugiado de la República Democrática del Congo que vive en Kenia desde 2015. Como miembro de una comunidad etnolingüística perseguida, huyó de los grupos armados que mataron a miembros de su tribu a Burundi y luego a Ruanda, antes de llegar finalmente a Nairobi.
Banza, ahora movilizador comunitario, ayudó a organizar el partido. "Es muy importante apoyar a los jóvenes y promover el talento juvenil para que no se involucren en las drogas y la delincuencia", dijo Banza. "Además, el fútbol es una forma de que los refugiados puedan compartir con el mundo los dones que tienen".
El partido tuvo lugar en el estadio Dandora de Nairobi, el 20 de junio. Ese día, con los equipos empatados 2-2, el partido se fue a los penaltis, que ganó el equipo local. Cada equipo recibió un trofeo, y HIAS entregó a todos los participantes un vale de premio.
El impacto positivo en todos los participantes, tanto refugiados como miembros de la comunidad local, fue visible, y todos aprendieron algo nuevo de la experiencia. HIAS Kenia está planeando actividades y eventos similares para los próximos meses.
"En el futuro, nos gustaría organizar partidos con mujeres y niñas refugiadas, y también probar otros deportes como el voleibol y el baloncesto", afirma Mito. "Queremos crear un ambiente de convivencia y entendimiento para más gente".
*Se utilizan pseudónimos para proteger la identidad de participantes.