Organizaciones judías piden al gobierno de EE.UU. que proteja a los niños no acompañados y a los refugiados
19 de junio de 2015
(NUEVA YORK, NY) - La comunidad judía estadounidense está enviando un firme mensaje al Presidente Obama y al Congreso para que respondan con rapidez y humanidad a la crisis humanitaria en la frontera entre Estados Unidos y México, manteniendo al mismo tiempo su compromiso de reasentar a los refugiados que huyen de la persecución en otras partes del mundo. La declaración -firmadapor 20 organizaciones judías nacionales- fue redactada y coordinada por HIAS, la organización judía mundial sin ánimo de lucro que protege a los refugiados, y fue firmada por la Liga Antidifamación, las Federaciones Judías de Norteamérica, la Unión para el Judaísmo Reformista y otras destacadas organizaciones judías.
Más de 50.000 niños no acompañados han cruzado la frontera sur de Estados Unidos en los últimos nueve meses, y se espera que lleguen entre 80.000 y 90.000 a finales del actual año fiscal. Melanie Nezer, Vicepresidenta de Políticas y incidencia, explica que "la ley de los Estados Unidos requiere que los casos de los niños de Centroamérica sean escuchados por un juez de inmigración antes de que puedan ser deportados. El sistema fue diseñado para servir a los 6,000 a 8,000 niños que solían venir a los EE. UU. cada año. No puede manejar 80.000".
La Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), situada en el Departamento de Salud y Servicios Humanos, proporciona alojamiento a estos niños no acompañados hasta que pueden ser entregados a un familiar o colocados en hogares de acogida, donde esperan su audiencia de inmigración. Debido a la crisis actual, la ORR se enfrenta a un gran déficit de financiación y ha informado al Congreso de que tiene previsto "reprogramar" los fondos que se habían presupuestado para pagar los servicios a los refugiados que llegan a Estados Unidos.
Grupos judíos instan a la Administración y al Congreso a aumentar inmediatamente la financiación del Programa de Admisión de Refugiados de EE.UU. para evitar recortes devastadores para los refugiados y las comunidades que los acogen. Apelando a los valores judíos de respetar los derechos humanos, proteger a los niños y cumplir el mandato de la Torá de "Acoger al extranjero," HIAS y sus socios instan al gobierno de EE.UU. a "hacer frente a esta urgente situación humanitaria manteniendo el compromiso de nuestro país con los solicitantes de asilo y los refugiados."
La declaración señala que "la única solución a largo plazo para esta crisis es un enfoque holístico que dé prioridad a la seguridad y las oportunidades para los niños" en el "Triángulo Norte" de Centroamérica -El Salvador, Guatemala y Honduras-, donde la gran mayoría de los migrantes han huido debido al aumento de la violencia y la delincuencia organizada transnacional. Ante la incapacidad de los gobiernos para garantizar la seguridad de sus ciudadanos, niños y familias huyen a Estados Unidos, así como a otros países de la región como México, Panamá, Nicaragua, Costa Rica y Belice. De hecho, la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) informa de un aumento del 712% de los solicitantes de asilo procedentes del Triángulo Norte en estos países, lo que indica que la gente huye en todas direcciones y que la afluencia de solicitantes de asilo no es exclusiva de Estados Unidos.