Las 煤ltimas decisiones del Tribunal Supremo menoscaban los derechos de los inmigrantes
Por Ayelet Parness
HIAS.org
27 de junio de 2022
En la pr贸xima semana, la Corte Suprema dar谩 a conocer una decisi贸n sobre Biden v. Texas, el caso que determinar谩 el destino del programa "PermanecerenM茅xico" - formalmente llamado los Protocolos de Protecci贸n de Migrantes - que obliga a algunos solicitantes de asilo que llegan a la frontera entre EE.UU. y M茅xico a esperar sus procedimientos de inmigraci贸n de EE.UU. en M茅xico. HIAS comparti贸 historias de clientes afectados por el programa "Permanecer en M茅xico" y se uni贸 a 61 organizaciones para contribuir a un informe amicus curiae en apoyo de la finalizaci贸n del programa.
En junio de 2021, la Administraci贸n Biden intent贸 poner fin a este programa, en virtud del cual las personas en espera de audiencias de asilo deben esperar en M茅xico, a menudo en zonas peligrosas donde suelen ser objeto de violencia y no pueden acceder a representaci贸n legal. Sin embargo, la administraci贸n reanud贸 una versi贸n modificada del programa en diciembre de 2021 en respuesta a una orden de un tribunal federal.
Sin embargo, mientras los defensores de los refugiados esperan ansiosos el resultado del caso Biden contra Texas, una serie de decisiones recientes del Tribunal Supremo tienen consecuencias perjudiciales para los inmigrantes, incluidos los que solicitan asilo en Estados Unidos.聽
En dos decisiones clave, Johnson v. Arteaga-Mart铆nez y Garland v. Alem谩n Gonz谩lez, el Tribunal Supremo dictamin贸 que los no ciudadanos no tienen derecho a una audiencia de fianza oportuna cuando son detenidos mientras solicitan un alivio de las 贸rdenes de deportaci贸n.
En el caso Johnson contra Arteaga-Mart铆nez, el tribunal dictamin贸 que Antonio Arteaga-Mart铆nez, ciudadano mexicano detenido por volver a entrar en Estados Unidos tras haber sido expulsado por orden de un juez de inmigraci贸n, no ten铆a derecho a una vista de fianza despu茅s de 6 meses, como hab铆a dictaminado un tribunal inferior.聽
La opini贸n del tribunal se帽ala que Arteaga-Mart铆nez hab铆a expresado su temor a ser perseguido si regresaba a M茅xico, ya que dijo que volvi贸 a entrar en los EE.UU. en 2012 despu茅s de haber sido "golpeado violentamente por miembros de una banda callejera criminal." A continuaci贸n, fue detenido mientras los tribunales decid铆an si su demanda imped铆a o no su devoluci贸n a M茅xico, un proceso que puede llevar meses o a帽os.
"Esta decisi贸n demuestra hasta qu茅 punto el Tribunal Supremo no est谩 en contacto con la realidad delhistorial de abusos, negligencia y muertes en los centros de detenci贸n del ICE ,documentado desde hace mucho tiempo ", dijo Shayan Davoudi, abogado de HIAS. "El tribunal consider贸 este caso de manera muy limitada; al hacerlo, perdi贸 la oportunidad de abordar la constitucionalidad de la detenci贸n prolongada de no ciudadanos, lo que en efecto abri贸 la puerta para que el ICE detenga indefinidamente a ciertos inmigrantes."
Del mismo modo, en Garland contra Alem谩n Gonz谩lez, el Tribunal Supremo dictamin贸 que los inmigrantes no pueden solicitar mandamientos judiciales para detener la detenci贸n prolongada o impugnar las pr谩cticas de deportaci贸n como una acci贸n colectiva, porque la ley federal de inmigraci贸n proh铆be los mandamientos judiciales emitidos para proteger a toda una clase. Los precedentes sentados por estos dos casos erosionan los derechos de quienes pretenden entrar en Estados Unidos al permitir que el ICE los detenga sin audiencia durante un tiempo prolongado.
"Estos inmigrantes han venido a Estados Unidos buscando seguridad frente a la persecuci贸n, oportunidades y una vida mejor para sus familias", ha declarado Smita Dazzo, directora principal de asuntos legales y asilo de HIAS. "En lugar de ello, se enfrentan a violaciones de su derecho al debido proceso en el sistema judicial estadounidense".
El tribunal tambi茅n sent贸 un precedente que hace casi imposible demandar a agentes fronterizos por violaciones constitucionales con su sentencia en el caso Egbert contra Boule. Robert Boule, propietario de un hostal cerca de la frontera entre Estados Unidos y Canad谩, demand贸 a Erik Egbert, agente de Aduanas y Protecci贸n de Fronteras de Estados Unidos, por violar sus derechos constitucionales despu茅s de que Egbert entrara en su propiedad sin orden judicial para investigar a un hu茅sped.
Cuando Boule pidi贸 a Egbert que se marchara, el agente le tir贸 al suelo, hiri茅ndole. Boule denunci贸 las acciones de Egbert a sus superiores, y el agente supuestamente tom贸 represalias denunciando los negocios de Boule al IRS y a otras agencias. El tribunal fall贸 en contra de Boule, sosteniendo que los particulares no pueden demandar a agentes federales individuales por reclamaciones de la Cuarta Enmienda por uso excesivo de la fuerza ni por reclamaciones de la Primera Enmienda por represalias.
Por 煤ltimo, en el caso Patel contra Garland, el Tribunal Supremo sostuvo que los tribunales federales no tienen jurisdicci贸n para revisar las conclusiones de hecho realizadas durante los procedimientos de inmigraci贸n relacionados con la concesi贸n de medidas discrecionales para evitar la expulsi贸n de EE.UU., una categor铆a que incluye las audiencias de asilo. Eso significa que aunque el juez de inmigraci贸n o la Junta de Apelaciones de Inmigraci贸n cometan un error manifiesto al denegar la solicitud de residencia permanente de alguien, los tribunales federales no pueden remediarlo.
En este caso, Pankajkumar Patel solicit贸 un ajuste discrecional de su estatus y el de su esposa, que le permitir铆a obtener la residencia permanente. Un juez de inmigraci贸n dictamin贸 que no cumpl铆a los requisitos porque, cuando solicit贸 su permiso de conducir de Georgia, marc贸 una casilla que indicaba que era ciudadano estadounidense. En su recurso, Patel aleg贸 que se trataba de un error y no de una declaraci贸n falsa deliberada.
En su disidencia, el juez Neil Gorsuch -al que se unieron los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan- escribi贸: "Hoy, el Tribunal sostiene que la burocracia federal puede cometer un error de hecho obvio, uno que resultar谩 en la expulsi贸n de un individuo de este pa铆s, y no se puede hacer nada al respecto."
Todas estas decisiones llegan tras el caso Arizona contra CDC, en el que un juez federal de Luisiana dict贸 una orden judicial contra los Centros para el Control y la Prevenci贸n de Enfermedades poniendo fin al T铆tulo 42, una orden de salud p煤blica de la 茅poca de la Segunda Guerra Mundial que ha impedido durante m谩s de dos a帽os que las personas soliciten asilo en la frontera entre Estados Unidos y M茅xico, supuestamente para evitar la propagaci贸n del COVID-19. HIAS tambi茅n contribuy贸 a un informe amicus cur iae en este caso en apoyo de poner fin a esta pol铆tica. El debate sobre el fin de la orden del T铆tulo 42 contin煤a en los tribunales y en el Congreso.
"Estos fallos judiciales son parte de una tendencia preocupante de decisiones legales y acciones legislativas que aumentan las probabilidades en contra de las personas que buscan seguridad en los EE. UU., mientras que no hacen nada para que el asilo y otros procesos de inmigraci贸n sean m谩s eficientes, ordenados o seguros", dijo Naomi Steinberg, vicepresidenta de pol铆tica y defensa de EE. UU. de HIAS. "Simplemente hacen que conseguir un tiro justo sea m谩s dif铆cil".