Representación jurídica de los menores no acompañados

Representación jurídica de los menores no acompañados

Desde octubre, casi 60.000 niños centroamericanos han huido a través de nuestra frontera sur. Una vez aquí, necesitan asistencia legal para navegar por el complejo sistema de inmigración estadounidense. HIAS, actuando en nombre de la comunidad judía estadounidense, necesita su apoyo para que podamos ayudarles.

La mayoría de los menores no acompañados que llegan a Estados Unidos tienen solicitudes legítimas de asilo. El noventa por ciento de ellos ha llegado para reunirse con un familiar en EE.UU. El cincuenta por ciento se reúne con uno de sus padres. En la mayoría de los casos, han huido de la violencia implacable y la desesperanza en busca de un lugar seguro y una vida mejor. Los viajes que emprenden son extremadamente peligrosos, lo que les hace vulnerables a la violencia, la violación y la explotación.  

HIAS está trabajando para proporcionar servicios legales a estos niños, y estamos dando a sus casos nuestra máxima prioridad. Muchos de estos niños llegan no acompañados y la mayoría se ven obligados a valerse por sí mismos en los procedimientos de deportación. Casi la mitad de estos niños no tienen un abogado que les explique el complejo proceso o que les represente ante el tribunal. 

En un escenario demasiado común, solicitamos en nombre de un niño el estatus especial de inmigrante juvenil. Esto le permitiría permanecer en Estados Unidos con un tutor y asistir a la escuela.

Además de proporcionar asistencia jurídica, HIAS aboga por políticas que garanticen la seguridad y el bienestar de estos niños. Por favor, ayúdenos. Inste a sus funcionarios electos a aprobar fondos de emergencia para atender tanto a los niños centroamericanos como a los refugiados y preservar las protecciones legales para los niños no acompañados.

HIAS está destinando todos los recursos que puede a proporcionar asistencia jurídica y abogar por estos niños. Por favor, únase a nosotros en nuestro trabajo para proteger a estos niños refugiados y garantizar que se respeten sus derechos. 

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