Para la cooperativa de refugiados de Ecuador, la autosuficiencia pasa por los plátanos

La Asociación Empresarial Agrollipteños de Ibarra (Ecuador), una ciudad situada a unos 110 kilómetros al norte de Quito, produce aperitivos ecológicos a base de plátano que son sanos y deliciosos. Formada por seis colombianos y siete ecuatorianos, los miembros del grupo son diversos en edad, sexo y nacionalidad pero, según Laura*, la presidenta de la asociación, les une un objetivo común: "ganar suficiente dinero para enviar a nuestros hijos a la universidad."

El grupo da crédito a HIAS por haberlos reunido. HIAS proporcionó a la Asociación Empresarial una micro-subvención de 3.500 dólares para ayudar a financiar la creación del centro de producción, acompañó a los miembros a comprar los materiales y suministros necesarios y ayudó a formar a los miembros en la gestión de una pequeña empresa. HIAS puso al grupo en contacto con una universidad local que proporciona asistencia técnica de forma continua en diversas áreas, incluida la realización de un ejercicio de mapeo del mercado para ayudar a determinar si sus productos se venderían y dónde. La universidad también ha prestado asistencia en diseño gráfico y ha enseñado al grupo a utilizar máquinas para fabricar sus aperitivos, que antes se hacían totalmente a mano.

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Recientemente, la Asociación Empresarial ha encontrado un nuevo espacio de trabajo, que el gobierno ecuatoriano ha accedido a cederles gratuitamente durante unos años. En el futuro esperan encontrar una fábrica más grande donde poder producir sus productos de plátano, así como aperitivos hechos de yuca. HIAS les ayudó a montar la nueva línea de producción y está ayudando a la asociación a obtener los permisos necesarios del departamento de sanidad para cada uno de sus productos. La financiación de este proyecto fue generosamente proporcionada por la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los Estados Unidos. 

Trabajar con la Asociación Empresarial Agrolipteños es sólo un ejemplo de cómo HIAS Ecuador ayuda a involucrar a los refugiados en iniciativas empresariales, animando a grupos de colombianos y ecuatorianos a colaborar para aumentar la escala y la presencia de sus negocios. Estas empresas cooperativas son importantes porque muchos colombianos que viven en Ecuador están atrapados en trabajos informales y no regulados.

"Es desgarrador ver a los refugiados, que se vieron obligados a abandonar sus hogares y medios de vida a causa de la violencia de las bandas en Colombia, sufrir aún más mientras intentan reconstruir sus vidas aquí", dijo Sabrina Lustgarten, Directora de HIAS Ecuador. "Desafortunadamente, el proceso para obtener documentación legal es complicado y largo, lo que impide a los colombianos acceder a necesidades esenciales como atención médica y servicios financieros, y dificulta la obtención de permisos de trabajo. Sin protección legal sus ingresos son nominales y corren el riesgo de ser explotados por los empleadores o, si trabajan por cuenta propia, de que las autoridades les cierren el negocio o incluso se lo confisquen."

Además de facilitar y fomentar las colaboraciones, HIAS Ecuador se ha asociado con el banco ecuatoriano Banco Pichincha para que los beneficiarios puedan abrir cuentas bancarias. El personal de HIAS gestiona una base de datos de empleo que incluye los perfiles profesionales de los beneficiarios, así como las oportunidades de trabajo. El personal trabaja para cultivar relaciones con empleadores nuevos y existentes, explicando los beneficios de trabajar con refugiados y solicitantes de asilo, y enviando perfiles de clientes cuando hay una vacante.

Al ofrecer un amplio abanico de programas que incluyen orientación sobre el mercado laboral, referencias laborales, formación profesional y talleres de empleo, HIAS espera ofrecer oportunidades para desarrollar actividades generadoras de ingresos a muchas más de las familias de refugiados que trabajan para reconstruir sus vidas en Ecuador. Estas oportunidades son especialmente importantes para los residentes de Lita, una comunidad rural cercana. Lustgarten anticipa que el proyecto tendrá un impacto positivo en esa comunidad desatendida al proporcionar desarrollo económico "utilizando su producto más emblemático."

"Como ha demostrado el grupo de Laura, si se les dan las herramientas y la formación adecuadas, los refugiados tienen la voluntad y el deseo de triunfar como empresarios", afirmó Lustgarten.

*El nombreha sido modificado para proteger la intimidad de la persona.