HIAS responde a las graves inundaciones en Chad

Actualización 20 de noviembre de 2022: La situación de las inundaciones en Chad ha empeorado recientemente. Las fuertes lluvias de septiembre provocaron el desbordamiento de los ríos Chari y Logone (que confluyen en la capital, Yamena), lo que obligó a miles de personas a buscar refugio. En la actualidad, más de un millón de personas se encuentran desplazadas dentro de Chad.

En dos lugares, Koundoul y Ngueli Pont, HIAS presta servicios de salud mental, deriva casos a servicios médicos y/o jurídicos, imparte talleres en violencia basada en género y distribuye alimentos y material como esterillas, lonas, mosquiteras y mantas.

Puedes ayudar a los refugiados afectados por las inundaciones en Chad donando al fondo de respuesta de emergencia de HIAS.

En la región de Koukou Angarana, al este de Chad, donde HIAS trabaja en el campo de refugiados de Goz Amir, más de 1.000 hogares se vieron afectados por graves inundaciones a finales de julio. La crecida de las aguas afectó también a muchas comunidades locales, y miles de personas se han visto desplazadas por las lluvias torrenciales, con decenas de hogares y negocios dañados o destruidos.

Todos los veranos se producen inundaciones en el este de Chad. Pero este año ha sido diferente. "Esta inundación nos ha sorprendido", dijo una víctima de las inundaciones a un gestor del programa de HIAS que estaba respondiendo sobre el terreno. "Hay agua por todas partes y demasiados mosquitos que nos enferman y nos hacen vulnerables. Necesitamos materiales de emergencia".

Como uno de los principales socios de ayuda humanitaria de ACNUR y del Programa Mundial de Alimentos en el este de Chad, HIAS está distribuyendo alimentos, sacos de arena, tiendas de campaña, mantas, láminas de plástico y mosquiteras. HIAS Chad está apoyando a los clientes afectados por las inundaciones, así como proporcionando asistencia a las comunidades de acogida en los pueblos de los alrededores.

"Estamos coordinando y respondiendo activamente a las inundaciones, y las lluvias siguen cayendo", dijo Carrie Taneyhill, directora de emergencias y respuesta humanitaria de HIAS. "Hay tanta atención en otras emergencias más grandes en las noticias en este momento, pero hay muchas crisis de menor escala que devastan comunidades. Esperamos ampliar nuestra respuesta para llevar algo de alivio a los afectados y asegurarnos de que sepan que no se les olvida."

Varias oficinas de HIAS en el campo han sido dañadas o destruidas por las inundaciones, suspendiendo temporalmente la programación. HIAS Chad cambiará su enfoque para proporcionar ayuda de emergencia en el campamento de Goz Amir y las áreas circundantes hasta que los refugiados puedan regresar y las oficinas puedan ser restauradas y/o reconstruidas.

"Siempre estamos en primera línea para prestar servicios esenciales y apoyo psicosocial en estas situaciones de emergencia, así como en situaciones prolongadas", declaró Roch Souabedet, Director de HIAS Chad. "Nuestro deseo y nuestro plan es poder asistir a los refugiados afectados y a la población de acogida ayudándoles a reconstruir sus casas y a conseguir alimentos y artículos no alimentarios que necesitan urgentemente para sobrevivir." Souabedet añadió que algunos edificios no están hechos para el clima cada vez más extremo, y que trabajará con los técnicos en nuevos materiales de construcción que puedan adaptarse mejor a las condiciones climáticas.

Chad es uno de los países más degradados medioambientalmente del mundo; gran parte del país tiene un clima árido y escasas precipitaciones. Como el suelo está tan seco, no siempre puede absorber las fuertes lluvias del verano, lo que provoca escorrentías e inundaciones. Desde hace años, la agencia de la ONU para los refugiados reconoce que Chad es especialmente vulnerable a los efectos del cambio climático. Mientras tanto, los conflictos y la peor sequía en décadas están desestabilizando a los países vecinos del este de África, aumentando el número de desplazados que llegan a Chad.

HIAS Chad se fundó en 2005 para responder a las necesidades críticas de los refugiados del genocidio de Darfur. Souabedet supervisa ahora a más de 120 personas que trabajan en 13 campos de refugiados a lo largo de la frontera oriental, además de una oficina en la capital, Yamena. La violencia y la inestabilidad en Sudán y Sudán del Sur, Nigeria, Camerún y la República Centroafricana siguen empujando a la gente a cruzar la frontera hacia Chad, agravando las ya prolongadas crisis de refugiados. En la actualidad hay más de 1,2 millones de desplazados en Chad, entre ellos 600.000 refugiados.

Ayuda a los refugiados afectados por las inundaciones en Chad donando al fondo de respuesta de emergencia de HIAS.