La historia de Nuria: Una niña de Kenia sobrevive a los malos tratos con la ayuda de HIAS

Nuria* es una refugiada etíope de 14 años, alumna de octavo curso, pero también superviviente de la violencia.

La familia de Nuria huyó de la guerra civil en Etiopía y llegó a Kenia hace más de 15 años y poco después nacieron Nuria y su hermano pequeño. Mientras vivía en Nairobi, la madre de Nuria desarrolló una enfermedad mental y, aunque recibió algún tratamiento, murió en 2018. Hakim*, el padre de Nuria, se volvió a casar, pero el comienzo de una nueva vida supuso el inicio de un violento maltrato para Nuria y sus hermanos.  

"Mi madrastra nos odiaba con pasión, era violenta y su arma clave era el maltrato psicológico", contó Nuria al personal de HIAS Kenia, recordando los tiempos difíciles.

La vida pronto se hizo insoportable para Nuria, ya que su madrastra Halima* la degradaba y humillaba todos los días.

"Me daba un montón de ropa para lavar, algo que a mi edad no podía hacer, y me recordaba constantemente lo perezosa y lenta que era", recuerda Nuria. "A veces me agarraba del pelo y me daba bofetadas.A menudo nos gritaba a mi hermano y a mí, llamándonos 'estúpidos' o 'inútiles', y nos golpeaba con cualquier objetoque encontrara", relata Nuria.

Aunque los malos tratos continuaron, el padre de Nuria no intentó detenerlos, lo que también hizo que los vecinos dudaran en intervenir. 

En 2019, a través de un líder religioso, Nuria y sus hermanos consiguieron una derivación a la oficina de HIAS en Kawangware, que gestiona programas de protección infantil que a menudo proporcionan apoyo psicosocial de varios niveles. El personal de Kawangware, una zona residencial de bajos ingresos en Nairobi, determinó que no era seguro para los tres niños regresar a la casa de su madrastra. En su lugar, HIAS consiguió una familia de acogida para los niños, donde un trabajador comunitario de HIAS y un monitor de protección infantil supervisaron de cerca a los niños. El caso también fue aprobado para un programa de asistencia financiera implementado por HIAS y apoyado por ACNUR. 

Con la ayuda de los trabajadores de divulgación de HIAS, toda la familia de Nuria -hermanos, padre y madrastra- se inscribió en un programa de asesoramiento de HIAS. La situación empezó a mejorar y parecía que Hakim empezaba a aceptar su responsabilidad como cabeza de familia y comprendía la necesidad de proteger a sus hijos contra cualquier forma de abuso.

De media, HIAS Kenia ofrece asesoramiento a unos 1000 refugiados al año. El equipo de psicólogos, trabajadores sociales y trabajadores de extensión comunitaria de HIAS colabora con los refugiados para poner en marcha intervenciones, actividades y sistemas de apoyo basados en la comunidad.

En septiembre de 2020, la familia se reunió y, desde entonces, vive junta en armonía. Hakim afirma que las cosas están bajo control y ve que su mujer se esfuerza por establecer un vínculo con los niños centrándose en la comunicación abierta y el respeto mutuo. 

"La unidad familiar es la mayor y más importante influencia en la vida general de un niño", afirma Rebecca Okech, trabajadora social de HIAS Kenia. "Al mismo tiempo, sentirse seguro y protegido también es fundamental para la salud y el bienestar de un niño". Okech seguirá colaborando estrechamente con el monitor de protección de menores y el trabajador de extensión comunitaria de HIAS en el seguimiento del caso.

Halima dijo que HIAS marcó la diferencia.

"Elproceso de formar una familia nueva y unida fue un reto para mí, que se vio agravado por mi embarazo y por la difícil vida en general en el país de asilo", dijo. "HIAS es la organización de refugiados que cambió mi mentalidad y siempre estaré agradecida por ello".  

Cuando Nuria se reunió con su padre y su madrastra, la familia acordó unas directrices coherentes sobre normas, disciplina y tareas que realizar. Nuria dice que ahora puede centrarse en su próximo examen del Certificado de Educación Primaria de Kenia.

"Estoy en paz", dijo. "Mis lágrimas se han secado y aspiro a ser abogada".

 *Seudónimos utilizados para proteger la seguridad de los clientes.